Central Office Restructure (En español)

Dear 91´ô¸ç Community, 

In the coming weeks, I will be making some difficult, but critical decisions about the path forward for our central budget, organizational structure and how we support our schools.

Despite months of work to reduce administrative costs with minimal impact to the classroom, we have not been able to find the savings necessary to eliminate our budget deficit for the 2025–26 school year. We have done significant work to reduce the budget this year; however, continued expenses associated with school improvement and special education have offset many of our reductions. While I wanted to do this work as a multi-year restructuring, we now have to take this step sooner than anticipated to ensure a healthy budget.

To get closer to where we need to be, we will be implementing a comprehensive reorganization of Central Office administration. This process will include eliminating positions, reassignments, adjusting pay scales and new reporting structures. 

Our Central Office teams are here to support the great work happening every day at our campuses. As we make these important changes, we recognize that these shifts may be felt across the organization, including at our schools. Our goal is to thoughtfully realign our structure so we can better serve campuses, strengthen our support systems and operate more efficiently as responsible stewards of public resources. We’re committed to ensuring a smooth transition and continuing to put students and schools at the center of everything we do.

Why now?
We recognize the timing of this announcement puts a strain on our central employees. Please know we did not arrive at this decision lightly. Over the past several months, we have explored every possible strategy to implement a more gradual restructure. But a combination of new, unanticipated costs—including school restart plans, additional special education costs due to a slower phasing out of our reliance on contractors than we were aiming for and curriculum expansion — has left us with no choice but to expedite those efforts. 

How we got here
Our board policy requires that we maintain a fund balance (our savings account) at 20% of our annual operating budget. Right now, our preliminary 2025-26 budget brings us well below that threshold to just 9.9% — a level that threatens our ability to meet payroll obligations and ensure long-term solvency. This is not sustainable. We must find enough reductions to get us to 15% to ensure financial stability and the continuity of services. 
Additionally, since 2017, our student enrollment has declined from 80,000 to 72,000, while the number of executive positions has continued to rise. While those decisions may have been well-founded at the time, we must realign our organization to match our current reality.

What’s next
This will be a phased process, beginning with Assistant Director-level positions and above. Those in this group will be notified of the outcome of the administrative review, including any changes to their current role, no later than June 5, 2025.
We know this news is difficult, and we commit to supporting every individual affected by these changes with respect and transparency. While these decisions are driven by fiscal necessity, we remain committed to our shared mission—and to each of our staff who serve with dedication and integrity.

Sincerely,


Matias Segura
Superintendent
91´ô¸ç


Reestructuración de la Oficina Central

Estimada comunidad del 91´ô¸ç: 

En las próximas semanas, tomaré decisiones difíciles, pero cruciales, sobre el futuro de nuestro presupuesto central, nuestra estructura organizativa y cómo apoyamos a nuestras escuelas.

A pesar de meses de trabajo para reducir los costos administrativos con un impacto mínimo en el salón de clases, no hemos logrado los ahorros necesarios para eliminar nuestro déficit presupuestario para el ciclo escolar 2025-26. Hemos realizado un trabajo significativo para reducir el presupuesto este año; sin embargo, los gastos continuos asociados con las mejoras escolares y la educación especial han compensado muchas de nuestras reducciones. Si bien quería realizar este trabajo como una reestructuración de varios años, ahora debemos dar este paso antes de lo previsto para asegurar un presupuesto sano.

Para acercarnos a lo que necesitamos, implementaremos una reorganización integral de la administración de la Oficina Central. Este proceso incluirá la eliminación de puestos, reasignaciones, ajustes salariales y nuevas estructuras jerárquicas. 

Nuestros equipos de la Oficina Central están aquí para apoyar el excelente trabajo que se realiza a diario en nuestras escuelas. Al implementar estos importantes cambios, reconocemos que estos cambios pueden repercutir en toda la organización, incluidas nuestras escuelas. Nuestro objetivo es reajustar cuidadosamente nuestra estructura para poder servir mejor a las escuelas, fortalecer nuestros sistemas de apoyo y operar de forma más eficiente como administradores responsables de los recursos públicos. Nos comprometemos a garantizar una transición fluida y a seguir poniendo a los estudiantes y las escuelas como el centro de todo lo que hacemos.

¿Por qué ahora?
Reconocemos que el momento de este anuncio supone una carga para nuestros empleados centrales. Tengan en cuenta que no tomamos esta decisión a la ligera. Durante los últimos meses, hemos explorado todas las estrategias posibles para implementar una reestructuración más gradual. Sin embargo, una combinación de nuevos costos imprevistos, incluyendo planes de reinicio de clases, costos adicionales de educación especial debido a una reducción gradual de la dependencia de contratistas más lenta de lo previsto y la expansión del plan de estudios, nos ha obligado a acelerar estos esfuerzos. 

Cómo llegamos aquí
La norma de nuestra mesa directiva requiere que mantengamos un saldo en nuestros fondos (nuestra cuenta de ahorros) al 20% de nuestro presupuesto anual de operación. Ahora mismo, nuestro presupuesto preliminar de 2025-26 nos sitúa muy por debajo de la cantidad permitida, a apenas 9.9%, un nivel que amenaza nuestra capacidad de cumplir con las obligaciones de nómina y garantizar la solvencia a largo plazo. Eso no es sostenible. Tenemos que encontrar suficientes reducciones que nos lleven a un 15% para asegurar estabilidad financiera y la continuación de los servicios. 
Además, desde 2017, nuestra matrícula estudiantil ha disminuido de 80,000 a 72,000, mientras que el número de puestos ejecutivos ha seguido aumentando. Si bien esas decisiones pueden haber estado bien fundadas en su momento, debemos reajustar nuestra organización para que coincida con nuestra realidad actual.

¿Cuál es el siguiente paso?
Este será un proceso gradual, comenzando con los puestos de subdirector y superiores. A quienes pertenezcan a este grupo se les notificará el resultado de la revisión administrativa, incluyendo cualquier cambio en su puesto actual, a más tardar el 5 de junio de 2025.

Sabemos que esta noticia es difícil y nos comprometemos a apoyar a todas las personas afectadas por estos cambios con respeto y transparencia. Si bien estas decisiones se basan en la necesidad fiscal, mantenemos nuestro compromiso con nuestra misión compartida y con cada uno de nuestros empleados, quienes prestan servicios con dedicación e integridad.
Atentamente,


Matias Segura                                                                      
Superintendente
91´ô¸ç